lunes, 2 de marzo de 2015

Las personas con discapacidad (también) son felices


Conozco a Piluca y a su hija, Ana, desde hace más de dos años y lo que comenzó con una entrevista profesional se ha convertido en una preciosa amistad. Gracias a ellas he podido ser un poco más consciente del mundo de la discapacidad y de que las personas que sufren algún tipo de discapacidad son muy felices a pesar de todo | Por Enrique Calvo y Piluca.

Para abordar el tema de las personas con discapacidad he querido invitar a Piluca, toda una madre coraje, que lucha por el bienestar de su hija Ana día a día. Ambas son un ejemplo de lucha y superación, lo han pasado muy mal pero también han aprendido mucho juntas. Tienen una relación madre-hija envidiable y es que, como lo han pasado tan mal, ya están curtidas y el amor que se tienen lo cura todo.

Está claro que las personas con discapacidad son muy especiales y a pesar de sus limitaciones no dejan de ser menos felices.

Pero os quiero poner un poco en antecedentes antes de continuar: Ana tiene discapacidad intelactual, pero no por ello la hace menos capacitada que el resto de mortales, para nada. Es una GRAN persona, lo pongo en mayúsculas porque es lo que siento, y quería que ella fuera un ejemplo de que el problema con la normalización de las personas con discapacidad lo tiene aún la sociedad, aunque poco a poco la cosa va evolucionando.

Lo que viene a continuación son pequeños extractos de un post de opinión que Piluca publicó en 2013 en su blog "Crónicas de Piluca".

"El relato del día de hoy va dedicado con todo mi cariño a mi hija Ana en particular y a todas las demás personitas especiales como ella en general y en él tratare de explicar los motivos, por los que a mi juicio, mi hija como probablemente las demás personitas con discapacidad intelectual  (que son con  las que más me relaciono) son tan felices como especiales. He aprendido que su discapacidad no es en absoluto un obstáculo para sentir y conocer en todo su esplendor todo tipo de sentimientos. 
A través de los ojos de mi hija: 
Por mucho que nos empeñemos no son iguales,  quien me conoce sabe que no creo en la integración, al menos con la interpretación que mayoritariamente se identifica. Para mí la integración seria posible cuando cuenten con la aceptación y el respeto de las personas que formamos parte de su entorno, cuando asumamos que tienen carencias y limitaciones, cuando comprendamos  que como personas que son tienen sus derechos y necesidades, cuando estemos dispuestos a facilitar todo lo necesario para mejorar su calidad de vida,  cuando reconozcamos que viven y sienten como nosotros, cuando seamos capaces de ofrecer igualdad de oportunidades y cuando aceptemos su valía sin exigirles mas allá de sus posibilidades. Cuando hayamos alcanzado todos estos objetivos entonces y solo entonces habremos logrado la verdadera integración. 
Lo primero que me ha llamado la atención es su aceptación al saberse diferente, ella no nos discrimina, nos acepta con nuestras normas, exigencias, regañinas, marcajes, enseñanzas, consejos...  somos sus cuidadores y guías y como tal nos respeta y nos acepta. Todos los que formamos parte de su vida, familiares, profesionales sanitarios, educativos,  formativos, de ocio.... etc. gozamos de su respeto, cariño y atención, en su nombre como en el del resto de personitas especiales os animo a devolverles los mismos sentimientos y atenciones así como a tratarles con el mismo cariño y respeto.
Acaso no son merecedores ????
 
He vivido la enorme capacidad que tiene para olvidar todo lo desagradable que como persona  que es va experimentando, pues su discapacidad no le exime de conocer lo peor del ser humano, la inocencia aunque en ocasiones la puede hacer vulnerable también la sirve de escudo protector, no vive de malos recuerdos, ocasionalmente recurre a ellos generalmente encaminada hacia una actitud o aprendizaje positivo,  su enorme capacidad para perdonar  y el desconocimiento del rencor le sirve de una ayuda importante para sobrevivir y lógicamente forma parte de su bienestar y felicidad. 
Es asombrosa su capacidad para magnificar algunos sentimientos,  la amistad, el  agradecimiento y especialmente el amor son imprescindibles en su vida, amiga de sus amigos, agradecida de corazón,  enamorada hasta la extenuación y afortunada al conocer el amor correspondido. También conoce otros sentimientos positivos como la alegría, la emoción, el respeto, la esperanza, la ilusión, la solidaridad, la felicidad, la gratitud... Ana es pura,  auténtica, no vive pendiente de lo que piensen o digan los demás. Al carecer de maldad no desperdicia su tiempo en fastidiar, aprovecha cada minuto en su propio beneficio procurándose confort y bienestar."

Como es lógico, no he copiado el post entero, que para eso os enlazaré después a él. Piluca es el claro ejemplo de cómo ha ido aprendiendo gracias a su hija Ana y Ana gracias a su madre. Por supuesto, en la sombra siempre está su padre y hermana, que quieren con locura a Ana. Pero en este mundo, gracias a Dios, no solo están ellas dos como ejemplo, son miles las personas que día a día van superándose y reflejan que las personas con discapacidad también son felices. 

Habréis podido comprobar que en todo momento me he dirigido a las personas con discapacidad con esas palabras: PERSONAS CON DISCAPACIDAD. Desde todo mi respeto a las entidades que usan el término "personas con  diversidad funcional" pero he de decir que no me gusta. ¿Por qué tenemos que maquillar la realidad? Personas con diversidad funcional somos todos: unos tenemos más maña con la cocina, otros con los deportes.. O hay personas que tienen un problema visual, a otros les falta alguna extremidad... ¿Por eso tienen diversidad funcional? Pues perdonar que os diga pero eso no es así ya que todas las personas estamos capacitadas para hacer una función pero se nos da mal... En fin señores, ¡en la variedad está el gusto!

:: Podéis leer el post completo de Piluca titulado "Discapacidad intelectual. El secreto de su felicidad" y os animo a que sigáis su maravilloso blog: http://pilucamonterde.blogspot.com.es/2013/12/discapacidad-intelectual-el-secreto-de.html


4 comentarios:

  1. Como siempre has tratado el tema con mucha delicadeza y mucho cariño y como siempre te lo agradezco

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    1. No tienes que agradecerme nada, en todo caso he de agradecerte yo a ti :)

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  2. que bonito !!! la verdad que si conocer este tipo de personas nos hacen valorar mas la vida y todo lo que nos rodea , me ha encantado :)

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  3. Ha sido muy bonito la forma en que tanto tú Enrique, como Pilar habéis hablado de este tema.
    He podido tratar con personas con discapacidad en una ocasión, y de lo único que se les puede calificar es de dulces, sinceros y fuertes. Porque la fortaleza que ellos tienen, a muchas personas sin discapacidad les haría mucha falta.

    Un saludo. ;)

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