jueves, 4 de agosto de 2016

1%



Todos somos dueños de nuestro propio destino. Las casualidades existen pero, toda causa tiene un efecto en nuestras vidas.




El camino de la vida no es recto, ni muchísimo menos. Está lleno de piedras y curvas que todos debemos de atravesar y apartar de nuestro sitio.

Personalmente, tengo que confesar que pertenezco a ese 1% que aún es bohemio, que cree en el amor por encima de todo, aunque a veces duela hasta el punto de asfixiarnos.

Muchas personas me critican por creer en el destino, en las casualidades y en el amor pero, ¿no son las mejores cosas las que se hacen con amor? Por ejemplo, cocinamos una tarta, tenemos todos los ingredientes pero, los más imprescindibles son las ganas y el amor que le pones al realizarla. O en el trabajo, aunque es cierto que todo el mundo trabaja por necesidad, aunque lo mejor es siempre amar tu trabajo  y dar lo mejor de ti.

Este blog no dejan de ser mis pensamientos en voz alta pero, ¿no pensáis que deberíamos aplicar lo que comento en todos los aspectos de nuestra vida? 

1 comentario: